“No todo está perdido”
Leía hace algún tiempo que por impacientes
fuimos arrojados del Edén como paraíso
y que por esa misma impaciencia
no nos es permitido retornar a él,
tanta la impaciencia por ínfulas de grandeza
y como testimonio la torre de Babel.
Hoy en día la tenacidad nos conduce
con crueldad y necio materialismo
a renovadas ilusiones de oropel
gastando inmensos recursos para comprobar
si agua en Marte y aquí mismo en el África
la población muriendo de hambre y de sed.
Más la posibilidad cierta de un mundo
más humano y armonioso no fallece,
mientras existan soñadores
con utopías a granel que conduzcan
a la humanidad hacia tiempos mejores,
y aunque parezca absurdo
cuenta con grandes fortalezas
en suerte de viña o de vergel
como la candidez de nuestros niños
y sus traviesas fantasías, además
de la música, el arte y la poesía, además
del canto en voz del ruiseñor o Cristofué…
y en lontananza la madre natura
siempre ofrecerá un hermoso arco iris
como divino símbolo de esperanza
confiados siempre en un nuevo amanecer.
Razón tendrá Neruda cuando dice:
“Sólo con una ardiente paciencia
conquistaremos la espléndida ciudad
que dará luz, justicia y dignidad
a todos los hombres.
Así la poesía no habrá cantado en vano.”
Cuestión de esperanza y de fe.
1190 27/11/2015
Como respuesta a la poetisa María Hodunok, y a su reflexivo poema: \"PENTAGRAMA DE COLORES\", disponible en: http://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-372129