Déjà vu,
Plasmada en poesía onírica,
Creada de las ansias de imaginar lo perfecto,
Con la lírica inspirada en tus ojos;
Espejismo anhelado,
Como el roció del cielo,
Que ablanda mi corazón,
Para crear de mis desiertos,
Hermosas selvas,
Y en ella percibir el eco tu risa.
Poesía onírica, hecha mujer,
Te presentas en mi mundo,
Conjugando el alba y el trinar de aves,
En cada risa;
Preludio compuesto por el silencio de tus ojos.
Déjà vu
Pintado en el lienzo de mi inconsciente,
Coloreado con el óleo,
Producido de la interacción del corazón y la mente,
En sueños extasiados,
Por conjugar la perfección y la belleza.
PABLO GÓMEZ
DERECHOS RESERVADOS