Trepó por la loma ataviada de riscos
por encima del futuro, buscaba su destino
donde los pájaros mueren eternidad
donde los buitres cantan a sus carroñas soledad,
el templo de los sueños hundidos en el tiempo
de los locos que caminaron cuerdos
de los cuerdos que se volvieron sombras
de los que escribieron su historia sin el lápiz
más que con la vida desgarrada del alma
callada como la noche que cegada por la luna
enhebra un torrente de penumbra oscuridad
subió hasta donde no se puede subir más
espectro se quedó, no volvió jamás.
.
Lebusla, 30-11-15
Nicaragua