No bien hube atravezado el tunel de tus pupilas,
para hallarme perdido en un laberinto sin salida,
quiero recorrerlo todo,
conocerlo palmo a palmo,
ir lento sin ninguna prisa,
encontrarme con esa inocente ternura que muestras,
cuando clavo mi mirada en la tuya y te ruborizas,
oh! que dulce mujer,
que luz insondable,
que fuego tan manso,
que mágica risa,
eres diferente a todas,
eres de miel,
eres de esas flores que tienen un brillo que cautiva,
y yo aqui perdido entre las paredes de tu laberinto,
deseando dar todo por que estes conmigo,
por que seas mia.