Di, si en la profundidad de tus ojos estoy en alguna parte.
Di, si en la inmensidad de tu boca me encuentro para besarte.
Di, si en los pliegues de tu cuerpo me sientes como deseaste.
Di, si en la obscuridad de la noche te muerdes por no llamarme.
Sé lo infinito del deseo cuando te sueño innombrable.
Sé lo amargo de tu ausencia cuando te siento distante.
Sé del calor de tus manos cuando ayer me acariciaste.
Sé lo puro de éste amor tan profundo... inagotable...
Dame los sueños hermosos que cercan tus sentimientos.
Dame el mar de tus sonrisas para navegar en silencio.
Dame el inagotable ser que encierra tu pensamiento.
Dame ese ángel desnudo que siento en cada momento.
Yo construiré para vos paraísos en el tiempo.
Yo te llevaré conmigo a la antesala del cielo.
Yo te rodearé de besos para que acabe tu miedo.
Yo te daré simplemente... el amor que voy sintiendo.
Mario Ranero