Corta lo que sobra de mi cuerpo,
el más mínimo rastro de piel muerta,
lo que sobre de él,
por dentro, por fuera,
corta lo que me hizo y me deshizo,
corta la fiebre y el vello que le nace,
la raíz de la piedad y las huellas húmedas de la conciencia,
corta cuanto pueda con ese filo ajeno,
que me inquieta, que me duele,
corta la razón que viene y no te detengas,
ni siquiera si piensas como,
corta mi llanto y diseca las lágrimas,
al final nada de esto vale
en el collage de tus recuerdos...