E Inquieta la luna pregunta a los cerezos,
por el desconcierto de unos cálidos besos,
¿Tal vez, fue un loco despertar de otoño?
¿O es el renacer de náufragos sin sueños?
¡Decidme! ¿sexo sin amor? ¿Que es eso?
Oleaje en un mar de rayos y tormentas.
Dulcemente contestan los cerezos a la luna:
Que nacen besos, centellantes como dunas,
bastando suave toque del roce complaciente,
desde otoño o en verano, sin pasión alguna,
y al instante nace sexo sin amor, ¡triunfante!
Por lo que os digo: ¡Huid! si teméis a la luna,
podrías enamoraros inerte, sin razón ninguna,
porque la carne es débil, y el placer es fuerte,
y después, ¡consecuencias sufriréis a muerte!
vuestros deseos anidando cuerpos sin fortuna,
que irán a la deriva, sin rumbo ni destino.
Si por desventura humana, vos nunca sentisteis,
sensación intensa, fabulosa, del mordaz suicida,
surgirán de nuevo gigantes las llamas del verano,
quemaréis el alma, saciando el prohibido fuego,
y tristes versos de adiós ¡serviréis al cupido juego!
Dejando recuerdos amargos de pasión y olvido.
Raquelinamor
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