He nacido en las alturas de los Andes
pertenezco a una raza cósmica
que ha venido desde milenios
amasando la vida en vasos de sabiduría.
Vengo de los lugares llenos de maíz
de penachos dorados, de semillas magníficas
de polvo de volcán, de tierra de fuego
el sol me ha pertenecido
su calor me ha abrigado por siempre
los montes me llaman y hacia ellos voy
a beber el hielo de sus cimas
las piedras son mis hermanas
y estoy formado de sus minerales
el vuelo del cóndor me eleva
la noble llama me cubre
domestico el agua en los páramos
el viento toca la quena para mis oídos
la bocina me entristece y me trae espíritus
piso poesía en mis campos y ella me posee
soy un ser afortunado
porque soy dueño de la luz y el aire puro
tengo una riqueza indescriptible
las flores y las aves me cubren
y danzan para mí solo.
Pero en estas tierras alguna vez
la bota del español holló mi altar
y me trajo un dios egoísta y brutal
violaron a mis hermanas
y mataron a mis valientes hermanos
trajeron el látigo , la espada de doble filo
la cruz de siniestro trazo
un libro genocida que no podía escuchar
ante tan macabra hora y desgracia
el sol salió vestido de luto
el aire nunca fue el mismo
abrieron el vientre de mi madre
y sacaron nuestro sagrado metal
sangre de nuestros soles
lágrimas de nuestros dioses
y nunca más pudimos con él
formar nuestros ídolos y héroes
cesamos de labrar las bellas figuras
de nuestras hermosas mujeres
la muerte nos recorría por la piel
mis padres sufrieron mucho
mas a ellos les debo mi nombre
y estoy orgulloso de mis venas
he sobrevivido a miles de muertes
cada átomo de mis huesos agradece
a mis antepasados no haberse rendido nunca
mis nombres no son bastardos
me pertenecen como me pertenece
mi corazón de piel de borrego
la mies de la quinua y la papa
tengo espíritu rebelde y libre
jamás me venderé al mejor postor
y estoy dispuesto a defender
hasta la muerte este espacio eterno.