Jorge Venegas

En Aquella Ciudad

 

EN AQUELLA CIUDAD

Me encuentro  nuevamente solo frente a esta inmensa catedral

¡Cuánto amo esta ciudad! , pero tú, ya no estas.

Sus inmensas campanas suenan y brillan como la eternidad,

pero tú a mi lado éramos esenciales.

Sin embargo recuerdo aquellos jirones empedrados

en la cual nos jurábamos amor y lealtad.

Sus bellos jardines que irradian felicidad.

Sin embargo  ahora me dejaste en total orfandad,

en aquella ciudad nos jurábamos amor y lealtad

Sus bellas casonas con sus grandes vitrales

que encierran un secreto que solo pocos entenderán

, fue en ellas donde supimos plasmar

este inmenso amor que sólo nosotros pudimos llegar a alcanzar.

En aquella ciudad, donde nos jurábamos amor y lealtad.

Sus milenarias procesiones, cargadas de fe y paz

nos tomamos de la mano, fue algo sin igual.

Sus inciensos cargados de fe y seguridad

, pudimos contemplar las estrellas

logrando entender nuestro propósito existencial.

En aquella ciudad, ahora tú no estás, extrañando tu serenidad.

Sólo me queda, contemplar nuevamente dicha ciudad.