I
Qué pasa en tu mente chiquilla,
Que no explotas tus ansias,
Sé que estás ahí callada y ausente,
Sé que aún están presentes,
Tu razón en mi mente, distante, mujer amante.
II
No es mi mundo sino tu sonrisa,
Que divaga en el sin fin de mis locuras,
Tu mirada,
Y ese par de ojos cafés mirándome,
Tu nariz oliéndome,
Y tus labios sintiéndome en una sonrisa,
Qué pasa por tu mente chiquilla,
Callada y ausente.
III
Veo en el horizonte,
Poco más allá del sol,
Tus labios en las nubes y tus ojos en el cielo,
Cielo café con sabor a ti,
Cielo a tus pies,
Mi morena ideal,
Callada y ausente,
Con tu voz en mis latidos y tu presencia en mi corazón.
IV
Qué pasa por tus ojos,
Cuando en el mundo miran aquellas cosas,
Esas que plasman mi nombre en ellas,
Y tus ojos se cristalizan,
Tus bellos ojos cafés que se embarnizan y se tornan más brillantes,
Como la luna llena en el cielo estrellado,
Como tú en mi mente,
Aunque estés callada y como ausente,
Aunque estés sin mí y yo sin ti sé que estamos juntos,
Aunque estés ahí como distante,
Nuestros corazones a un mismo latir se dejan citas para tomarse un café.
V
¡Oh morena!
Sirena,
Musa,
Princesa,
¡Reina!
Tu que sonríes con la pupila de tus ojos cuando Dios te menciona mi nombre,
Que sabes que es pasado,
Que sabes que es presente,
Que sabes que es futuro,
Que sabes que es parte de ti,
Y del insomnio que me provoca el café,
Ese café de tus ojos,
Que sonríen cuando visita una estrella,
Y crece una flor.
VI
Ojos cafés,
Que miran más allá de lo que observan,
Mi ser te pertenece,
Y si hablo es por ti,
Si lloro es por ti,
Si amo es a ti,
Si río es por ti,
Si camino es por ti,
Si busco algo es a ti,
Si necesito de alguien es de ti,
Si hay algo que quiero,
Es ver mi reflejo en tus ojos cafés,
Es ver tu sonrisa con mis ojos cafés,
Es vernos, mientras nos tomamos un café,
Mientras te amo más,
Mujer de miel,
Más que ayer.
VII
Qué pasa por tu mente mujer de miel,
Chiquilla de ojos cafés,
Despiertas los sueños de los dioses caídos,
En el observar de tus ojos al horizonte en el cielo café sabor a ti,
Cielo a tus pies,
Chiquilla de ojos cafés...