Niña tu que sueñas con amor,
Con un hombre atractivo y con pudor,
¿le sonríes al primero en tu balcón?
Que te da canción y no amor.
Niña tu que alagas a la vida
Por tu don y sabiduría
¿Por qué emprendiste huida?
De la vida que te dio la vida.
Y vuelves arrepentida
Sin amor ni mentiras
Al emprender la huida
Con tormentosa fatiga.
¡Ay! Niña que luna pareces,
Si brillado antes hubieses,
Si brillado a mis ojos hubieses.
No estarías herida, ni
Estaría amándote así.