En tierras del Rey Arturo
hay una gran pataleta,
pues manda con mucha jeta
un político tozudo.
¡Ay Arturo, qué peludo!
¡Qué tormento de dilema!
O te quedas sin la cena
o te dan el hueso duro;
pues en tu casa, seguro,
como profeta das pena.
Carlos Oyague Pásara (Barcelona, España)