\"No importa
cuánto hayas leído de tu historia.
No importa
cuánto conozcas de tu antepasado.
No importa
cuántos demonios te han abrazado.
No importan sus marcas,
ni la de ellos,
ni la de los muertos.
Ya no importan
las leyes de los ángeles.
Ya no importa
ser un sacrificio.
Lo importante,
ahora mismo,
es saber quedarte en la dimesión que correspondes,
y no dejar que ellos te arrastren...
Donde la luz
ni siquiera de la luna,
perdura.
Donde el dolor no tiene fin,
donde el descanso no existe
mientras que los gritos y lágrimas te abrazan,
ellos se ríen a tu alrededor,
el tiempo no para,
no pasa.
Tu piel se vuelve pálida,
no puedes pedir ayuda,
la palabra \"ángel\" ya no existe.
Y gracias a tu estúpida inmadurez de creerles,
dejas que te atormenten,
y pierdes.
Quedándote atrapada en el limbo.\"
Dorian.