niebla gris,
susurras, la nombras
una encina infeliz,
te abriga en las sombras
huir y volar,
el designio te vulnera
su alma en cera,
se tuvo que apagar
eres dolor,
asedias dos mundos
tu espectro evasor
pregones profundos
callan las plegarias,
torvo es el augurio,
tus citrinas incendiarias
hielan mi tugurio
entre las grietas exhalas
graznando la guías
despliegas tus alas
hacia franjas sombrías
te arrastran los vientos
absorbes sus lamentos
eterna tristeza
crepita tu pobreza
ampara su sueño
en el paso del leño
tú siempre vas
yo no la veré...nunca más