Con un beso a la mejilla
y la sonrisa de carmín,
se presenta ante la vida
la que no quiere morir.
mas la muerte con su brazo
una vuelta quiere dar,
para con un beso a su mano
querersela llevar.
¡AY!... la que no quiere morir,
la vida le susurra al oído:
vive y se tan feliz.
y por el otro lado la muerte,
vuela como un halcón;
¡que ya estas en en valcón!.