ESPERANZA
La esperanza para el pobre
es un eslabón perdido,
que este busca compungido
entre lo plebeyo y noble,
pues son de esta cadena su doble
en un mundo sin sentido,
donde aquello transmitido
suena como un pasodoble.
Todos vamos enlazados
por la intransigente cadena,
con eslabones que dan pena
y otros bellamente repujados,
de los que van enganchados
cuantos dirigen la escena,
sin saber que su condena
es seguir encadenados,
en esta cuerda de penados
de la que el mundo está llena.
Abandonar la cruel cadena
muy pocos han conseguido,
siendo esta esperanza eterna
de cuantos hemos nacido,
como casi todos, desvalidos,
para luchar contra la terna
que dirige quien gobierna,
y al que habíamos elegido,
de los variados escogidos
en esta lúgubre caverna.
Joanmoypra