Por tus besos iría
al fin del tiempo
rajaría mi cuerpo
y sin sobrevivir
el ultimo verso
suspiraría un te quiero.
Por tus manos al sol
mudo de alegría
bajaría para que a tu
corazón sanado de amor
calor le diera.
Que al amanecer en tu cuerpo
yo aria una luna
de ti, pues para mi ser
aquella blanca luz sentido
no tiene, y te diría:
Dame esa luz helada
que a mi nuca ha de erizar
y con mil gritos de desespero
decidme a mi cuanto me echas de menos.
y a tus senos susurrárles
al oído quiero besarte
sin prisas y con mi boca
que inerte quedo,
desnudarte a mordiscos
un pedazíto de ti.