Gira el sol en el techo abovedado
Inunda las esquinas de veranos infantiles
Es nuestro pan
Dorándose en un rincón
Es nuestro tiempo
El que ahora ilumina el sol
El alegre jazmín que ayer te sedujo
Se desvanece ahora ante el invierno
Y de su dulce aromo
Sólo nos queda el recuerdo
Y el sol gira y palidece
Como nuestros rostros
Como nuestro pelo
No crepitan aún las llamas
Que consumen nuestros enseres
Y están calladas las voces
Que mañana dirán quien eres
El reloj gotea sin tregua
Un filtro incierto sobre nuestro destino
Brotará el jazmín, madurará lo colmado
Llenará de risa y juego nuestras tardes de verano