Encontras esas maneras de derramar palabras con tanta mansedumbre que me enraizas en la espesura de tu selvatica incertidumbre, desvario no se como razonar tus bocetos, mensajes esparcidos entre predicados y sujetos deshilvanando van al heraldo cupido, irradiandome sensaciones puras y un vendaval de suspiros.
Sumerjido estoy en la tibieza de tus arterias, tu brebaje fue implacable, invisible se disemino entre los intersticios de mi alma, que parece desorbitarse cuando tus labios entran en mi atmosfera languida.
Hoy no se con que fuerzas me libre de tus ojos, me zafe de tus brazos, me quise detener para poder verte alejar en el camino y en cada parte de mi reverdecen escalofrios, pideme que te acompañe, mi corazon garabatea un pendulo entre tu, mujer bella, y la soledad de la multitud.
melitoncernadas.