Podrá faltarme el aire que respiro,
podrán la luna, el sol, el mar y el viento,
la sombra que acompaña al sentimiento
y el aura que le adorna a mi suspiro
e incluso hasta el aliento.
Podrá surgir del cielo algún lamento,
y un grito resoplar, si es de recibo,
la duda que me agobia mientras vivo,
enfado que atenaza con el viento
y quiera hacer cautivo.
Podrán caer mil aguas a raudales
y el mundo que amanezca dando vueltas,
las lágrimas que en ácido disueltas
amenacen con traernos muchos males
o aunque vengan revueltas.
Y aunque puedan pensar que hoy yo deliro,
que loco estoy de atar o son amaños,
juro aquí ante el buen dios y sin engaños
lo mucho que echo en falta y que te admiro
¡oh, mis dieciocho años!.
©donaciano bueno
http://www.donacianobueno.com/