Tú y yo somos como las dos Españas,
Como los dos bordes de un mar bravío:
Las olas dentro de nuestras entrañas
Quieren unir tu corazón y el mío.
Tú y yo somos la tierra separada,
Las heridas abiertas del olvido.
Mi mirada es mitad sin tu mirada,
Un ojo de cíclope enceguecido.
En esta guerra en fin nos resolvemos
Como dos pieles faltas de saliva,
Como dos pájaros, como dos remos
Astillados, pobres y a la deriva.
Dos coronas del rey de corazones,
Dos piezas de ajedrez republicanas...
Tú y yo... Nos buscamos en los rincones
Y siempre nos quedamos con las ganas.
(Tú eres un sístole con sed de infarto,
Yo estoy harto de contar despedidas...
No llevo las bridas. Está lloviendo
La pólvora mojada del olvido).