\"CAMPOS DE ACACIA...\"
Las acacias se deshacen en pálidas auroras
en lagos cristalinos de beso se enamoran
un ave busca en sus dudas... pausado nardo y beso
de vuelo acariciado... el rayo se ennoblece,
en el acantilado acontecido... de mis versos se libera,
la estrella ambarina que vence a mi tristeza...
de lirio... los labios... se liberan en sus anhelos,
en opalinos pensamientos... zaheridos de nobleza,
la tarde se deshace... en pálida zozobra,
entre arroyos cristalinos... mis versos se licúan
y mis sueños se deshacen... en fontanas hoy silentes,
en el imperio enardecido... de mi duda, en su congoja.
\"CRÍPTICOS DESEOS...\"
En el paraíso inmisericorde...
de mis sueños te enamoras,
de crípticos deseos heridos de quimera,
la melancólica gacela... vino a buscar,
extraña cerca en campos de amapola,
pálidamente cobijada... entre los hielos cristalinos,
preñada en sus heridas... la tarde se enamora,
de la angustiada saeta... el alma se adormece,
en campos ilusionados huidos de abandono,
entre la alondra herida... en su alzado vuelo
la tarde se libera...
en campos mortecinos... heridos por la aurora.
\"MÁGICO SILENCIO...\"
La herida de mi beso es ave lisonjera
se alza en valles compungidos... de mágico embeleso,
entre arrayanes se vierte... y en fuentes se licúa,
herida en sus pasiones... en lagos se entretiene,
cogí las enternecidas rosas del jardín de las delicias,
del amargo fruto... la noche se libera,
una avecica alzó herido... el vuelo entristecido...
entre las alondras asaetadas... y huidas de quimeras.
\"AL ALBA...\"
El acantilado de mis labios... se deshace en su pereza,
en pálidos silencios heridos de deseo
las cárceles de cera... se mecen de tristeza,
asetadas de lirio... y beso manifiesto,
en campos de mágica ternura
mi alma...
de su labio se libera,
en campos opalinos... de boca se entretiene,
de pálidas quimeras... mi alma se estremece,
en piélagos huidos... y heridos de nobleza,
de nardo y beso... se visten las auroras,
en los archipiélagos heridos... de rosa y labio seco,
diamantinas joyas zahieren hoy la tarde,
en pálidas razones... mis besos hoy se vencen.
AUTOR: JOSÉ A. PANIAGUA MARTÍNEZ.