Y de repente te vi venir
Así, sin avisar, sin esperarte
Llegaste sin necesidad de buscarte
Llegaste en un día de mucho frío
Ese frío que eriza mi piel
Que hoy vuelve todo color de miel
Llegaste para encender esa flama
Que hasta hace mucho no se encendía
Y llegue a pensar que ya no existía
Que tan sólo eran cenizas!