Por donde sea que voy
no importa si es de día o de noche
en cualquier lugar
donde mis pies encuentren soporte,
no importa si es la luna o el sol
quien en ese momento sea emperador
-- busco consuelo
para mi alma solitaria
para mi corazón acongojado
para mi mente castigada
-- busco consuelo
en las ardientes arenas del desierto
en la cienagas de las selvas olvidadas,
en las calles de las ciudades condenadas
-- busco consuelo,
para mi cuerpo cansado
para mi reseca piel
para mis nublados ojos
-- busco consuelo,
para las brutales puñaladas
para las execrables traiciones
para las inmerecidas conspiraciones
-- busco consuelo
aquel que yo se que hallaré
no donde siempre lo he buscado,
sino el la limpia mortaja
en el silencio de la urna adornada
en la quietud de la muerte esperada.