Quizá nos dejamos de querer y no me dí cuenta.
Pero no, no te puedo dejar de querer porque te quiero.
Tu también me quieres,
lo sé.
Nadie me lo ha dicho,
a veces ni tú.
Los pensamientos enturbian los sentidos,
pero la luz siempre está,
es parte de nosotros,
de nuestros quereres.
Nos amaremos siempre,
es amorosamente
irremediable.
Lisemelino