consigo cubrir con sentido
de pasión, y alegría,
un objeto de rojo encendido
hago uso desesperado de mi razón.
Protejo y guardo, agrego recelo
un par de princesas,
vienen con llave,
tan fácil lo abren.
Vierten cariño de alto kílate,
feliz objeto, cargado de ilusiones
que tienes espacio.
Sólo ellas a su antojo
te hacen grande.