El aire recorre los sentidos
Misteriosos suspiros gritan anhelantes
las hojas de los árboles se agitan con esmero
A la llamada del baile al son del viento
Ruidos artificiales contaminan la virtud
La energía que fluye sin prisa y sin descanso
Una suerte mística que brilla y hace brillar
Los reflejos que son ventanas a laberintos transmundanos
La mansa y fría brisa acaricia la soledad de los pacientes
Que esperan tristes el medio que les lleve allá donde se encuentren enteros
El fino día puebla las almas caminantes
Que a la noche destierran y abandonan
a su exilio..