Soy una romántica empedernida, no lo puedo evitar...
Me encanta soñar con las historias de amor que leo en los libros o las que aparecen en las películas.
Sí, ésas en las que los enamorados van a citas maravillosas, se besan bajo la lluvia, se enfrentan a todo y a todos por amor...
Esas en las que, cuando parece que nada, absolutamente nada, puede volver a unir a dichas parejas, siempre hay uno de ellos que se arriesga y lucha por recuperar al otro, llenan sus casas de cientos y cientos de flores, se declaran en mitad de la calle, corren hacia el aeropuerto en el último momento o se recorren medio mundo hasta encontrar a esa persona que, en sí misma, es todo su mundo.
Sé que esas cosas no suelen ocurrir en la vida real y, por ahora, yo no necesito tanto.
Pero, ¿Sabes qué? Si tan sólo hubieras aparecido frente a mí, con una sonrisa iluminando tu cara, todo sería diferente...