Disfrutar de la vida Sin preocupaciones,
De cálida bebida Y de internas canciones;
Disfrutar del instante, Que no importe ni el clima,
Con el alma vibrante Al llegar a la cima;
Sentirse satisfecho De haberla conquistado,
Por tanto esfuerzo ya hecho Y verlo compensado;
Mirar ardiente ocaso: Excelso panorama,
Sin ambicionar fama; sí, ese tierno regazo;
Escuchar la armonía En esa soledad:
Hallar felicidad ¡Rebosante alegría!...