Sin caer en el exceso
que me brinda tu finura,
ver bajo de la cintura
sin antes robarte un beso.
Aunque la verdad confieso,
adivinando, supuesto
lo que tiene está bien puesto,
solo talvez humedades
circunde las oquedades,
que a disfrutar ya me apresto.
Por: Alejandro O. de León Soto
Tijuana, BCN. MÉXICO, Enero 18/16