A estas alturas de mi vida... la de mi nivel emocional...
Tengo mi cielo, mis tempestades... mi lucha, mis batallas... mis tiempos subliminales;... y al centro de una adyacente encrucijada,
un camino lleno de trabas, ¡si!;... pero mi camino...
Me encuentro en la tesitura de tener muy claro que lo que siento es intenso, y es si no, no me molesto o no lo escribo...
Y porque merezco, como cualquiera un amor sin tiempos..., torno en poesía para apreciar cada instante y todo tipo de momento...
Como el de ver dos espigas, que mecidas por la brisa se buscan apasionadamente, e insistentes enredan sus cañas bajo el rayo del sol que les deja brillo oro como testigo... oro que baña, el campo que las acoge y silenciosamente habitan...
Como el de encontrar en mi ser, el mismo ser que me habita, y la química por sentir bonito me facilita...
para en ocasiones; tener alquimia... que provocada por más de una que otra arritmia, lleva a vivir la magia del amor...
Como poder percibir y saber que el mejor verso se halla en el libro de una piel llena de caricias... y que de ellas nace el fruto de un sentimiento germinado por la siembra del más puro amor.
O como el de sentir un sinfín de sensaciones, cada una libre y a su momento,... y aunque no es mío el cometido de saber ni poder controlarlas, si lo es en ellas... sumergirme sin querer, hasta después pasado el instante que muestra mi fragilidad;
mas de ello sentir en mi corazón repleto y a rebosar; un
BIENVENIDO ALIENTO.
SSM. 19-01-2016.