Leer contigo quiero por las noches
recorrer de la mano el infinito
soñar el mismo cuento laberinto
recordar un camino por las flores.
Ser de la narración los personajes
volver a enamorarte en cada mito
reencontrarnos siempre en un distinto
instante de la historia y sus parajes.
Creer que coincidimos en los sueños
atribuyendo a Dios nuestra fortuna
e ignorar de cual cuento somos dueños.
Con la lectura a la luz de la Luna
caer, en otro sueño igual de bueno
enamorados casi por fortuna.