A ti, que para mi lo fuiste todo,
a ti, con quien no tengo secretos,
a ti, a la que yo no quiero poco,
a ti, que te regalo todos mis sonetos.
A la que lucha por mi en mi día a día,
a la que se deja por mi, el alma y la vida,
a la que me regala todo su corazón,
y a la que me apoya por cada acción.
La persona que me dió la vida,
la persona que por mi daría la suya,
la persona que me hizo a medida,
que sepas, que mi vida es tuya.
A la que he visto llorar de alegría,
y a la que he visto en las mayores tristezas,
a la que cuando anochecía,
te decía que si algún día tropiezas,
ella atí siempre te amaría.