Voy por un camino que hay formado por dos líneas paralelas,
Donde escuchas el viento que transporta el olor a hojas secas,
Con manzanas, naranjas y otras frutas dulces y frescas caídas
Que en otoño sienten el rozamiento de la tierra dura y rugosa.
Voy por un camino que hay formado por dos líneas paralelas,
Que me llevan a una montaña vieja con suaves colinas lindas
Con una casa de madera grande y llena con mi familia reunida
Para prepararse de la llegada del invierno con mucha alegría.
El número once es el último mes que se halla en otoño y se despide
Con la letra “o” de obispo que es el rey que manda esta estación,
Pero se sabe que el próximo año con muchísimo viento vuelve
Y es esperado como siempre con una grandísima ilusión.