Hoy recorro ese espacio
que hay
entre tu cuerpo y el mío
así bien apretados,
donde no quepa más
que el suspiro
ese agitado por una pasión
en desenfreno…
siento la sensibilidad en mis senos
que contactan con tu piel.
En un hechizo insaciable
queriendo que tu boca
los quiera poseer.
¡Ay de este amor!
como murmullo abandonado
a la intemperie natural
de los besos más deseados
mi piel seducida por ti,
ya quiere a ti llegar.
Este amor es
como arrullo al pasar,
cada vez se hace apasionado
e infinito.
Amor permíteme pedirte,
que no me abandones...
que mi cuerpo
envuelto en soledad
en silencio te llama
porque te ama...
¡porque no ves que te necesito!