Alexander Cambero

Champgne

El no tenerte es un tormento de viejos tranvías con horizontes lejanos. Ruedas que se deslizan por ardientes rieles de pasos extraviados. Se escucha el temblor del armatoste de hierro sobre el estoico esqueleto metálico. Millones de destinos en el albur de la vida, múltiples senderos para soñarte profundamente. Cada belleza descubierta, es una nueva joya para tu corona. Escribo en las alas del gran amor que seduce a mis entrañas. Párrafos dulcemente engalanados con tu hermosura incomparable. Champagne de poesía desbordada como riachuelos espumosos de besos con sabor a lluvia. Vertientes que anegan al olvido con la majestuosidad de tu aparición. Caen uvas del manojo de tu sonrisa, apenas se han despegado del lazo dorado de tu regalo. La magia excelsa de tu ser, es la fruta deliciosa que acaricia el viento en coqueta galantería. El valle resplandece cómo cuando las nubes perfuman tus cabellos. ¡Oh, delicado encanto de mujer, átame a tu yunta, sumérgeme hasta el abismo en donde encubres tus primigenios tesoros…¡ ¡Describe tu paisaje en el oráculo de tu santuario inmarcesible, lléname de ti para hacer retroceder al tiempo, con las llaves del pasado entre sus manos…¡ Siento el perfume de tu cuerpo impregnarlo todo. Has desparramado los aromas del cielo. Hueles a sándalo real, como si los inciensos alados nacieran de tu pecho.
He buscado olvidarte en el escueto amanecer que exhibe tu silueta en el despertar de la luz. Tratando de demoler tu recuerdo, los días pasan con la candidez de la hoja que cae en la grieta de la herida. Sonámbulos murmullos gritan tu nombre desde el mundo de la oscuridad. Con el paso del tiempo, el amor ha renacido, como el mosto del buen vino curado en barricas de madera maciza. La flor de los delirios acompaña la cama vacía; es imposible que tu recuerdo no se abrace con el insomnio absorto en ti. Escucho al reloj rondar con sus espadas marcando un designio. El corazón es un templo asido a cada partícula de tu ser, una pasión andariega sin marchas rimbombantes; una sutil caricia es recordarte, cada pensamiento es el compromiso de adorarte hasta que este pecho tenga aliento…