A orillas de tu cuerpo está la vida
Recostada en pesebre de azaleas.
A orillas de tu cuerpo las mareas
Traen el mar como en una bienvenida.
A orillas de tu cuerpo, mi delirio...
A orillas de las arenas primeras
Que van a ser cristal a tus caderas
Con blancura astral, gélida de lirio.
A orillas de tu cuerpo lo que siembre
Se convertirá en flor del alba buena.
A orillas de tu cuerpo esta verbena
Será una flor del hielo de noviembre.
A orillas de tu cuerpo el sol se acuna,
A orillas de tu cuerpo si descansa
Con claridad cabal, profunda y mansa.
A orillas de tu cuerpo está la luna.
A orillas de tu cuerpo resucita
Todo lo que murió, lo fallecido.
A orillas de tu cuerpo está el olvido
Desangrando su amapola marchita.
A orillas de la vida está tu cuerpo,
Y a orillas de tu cuerpo está la vida.