kavanarudén

Deseos de un escritor errante

 No le pido a la vida soluciones, sino oportunidades. 

 

A Dios, que mantenga mi salud, ya que inteligencia y voluntad me ha dado.

Siempre lo he sentido a mi lado.

Agradecido estoy por todo lo que me ha concedido.

 

Amigos tengo, que son mi apoyo, mi pañuelo y mi conciencia.

Gracias a cada uno por su sinceridad, solidaridad, cercanía y paciencia.

 

El amor me ha sido regalado en el momento menos pensado.

Vagaba solo y sin rumbo, mendigando afecto, dando tumbos.

Fue él quien me encontró, mi vida entera cambió. Su luz pura me alumbró.

 

No pido que desaparezcan todos los obstáculos, pues siempre en mi camino los he de encontrar.

Ellos me han hecho madurar y poder conocerme; solo pido paciencia e iluminación, para poderlos superar, siendo más humano en mi caminar.

 

Es mi deseo no equivocarme más, mas no soy ingenuo. En algo me he de equivocar. Pido humildad para reconocer y valor para pedir perdón si a alguien, al equivocarme, hice mal.

 

En la hora del dolor, de la traición, del engaño, caigo en la tristeza.

Pido fortaleza y templanza para sobreponerme y no perder la esperanza.

 

Pido siempre prudencia para discernir entre el bien y el mal.

No dejarme por mi ego conquistar, comprometiendo así mi bienestar.

Con mi mano abierta y disponible quiero siempre estar.

No quiero jamás cansarme en mi lucha por ser cabal.

 

A la musa pido inspiración y que sea dócil a ella en mi escribir.

Que puedan mis letras existir, volar a un paraje desconocido.

Que encuentren un cálido nido, allá, sea donde sea.

Pues inútil es el escritor si no hay quien lo lea.