Contemplación de un juego...
La quietud de la noche permite ver el juego
de amores furtivos y encuentros
de las olas del mar que coquetas
permiten a la luna mostrar su belleza
en el espejo líquido que se mueve
y en cuna eterna, se adormece...
Dispersando sus olas con mucha fuerza
el mar cautiva y arrastra a la luna,
montada en lomo de agua
como intencionadamente parece,
sobre corceles que en tropeles desbocados
galopan y corren ...ansiosas,
a todo correr...desesperadas
hasta llegar a las orillas de arena blanca
que pacientemente...siempre esperan.
La luna no le sigue su juego,
quieta ella, permanece mirando desde arriba,
sólo contemplándose en el gran espejo
de cristal en movimiento,
que la invita a que baje, que se abracen...
El mar no está conforme con caricias lejanas
quisiera besar la cara de la luna enamorada
que siempre, desde siempre puede amar
desde la distancia...sin tocarla.
El mar enamorado, le tiende trampas
- ¿cómo quisiera atraparla...?
Confabula..se pone de acuerdo
- solicita ayuda a las espumas blancas
con su red tejida con borde de luces,
burbujas de aguas inquietas, que siempre danzan...
para utilizarla como una red para atraparla.
Siempre ella , la luna... con su carita redonda , se escapa
Las espumas se rompen en trozos separados
quebrando la unidad de la gran red
por el mar esperada...
Las espumas se duermen...en la gran cama de agua
como enjambre de luces islas ...
Zurcirlas como red para la pesca,
para atrapar la luna...jamás ha podido.
El mar se queda triste...una vez más,
sin su beso de amor directo en la mejilla de plata
de su luna...
El torbellino de las fuerzas de ansiedad de las olas
por llegar antes a besar las arenas
- rompe la unidad por aparición de celos
de amores comprometidos en cada ola
y la arena quieta.
Gozar el primer beso...es el premio
aunque ello signifique, consumirse en ella
y no volver a los lechos iniciales
del mar y sus misterios...
Ni red completa, ni abrazo de luna cautiva
el mar ha logrado nunca
- como deseo cumplido
a pesar de los intentos repetidos,
su amor solo ha de ser de lejos,
como siempre lo ha sido, duradero y franco,
fortalecido y copiado en los tiempos.
Amor de caricias a distancia,
como amores escondidos
- sin olvidos...
Amor de mar y luna con miradas distantes,
con caricias por mediación de un espejo
- con caricias de imagen como en sueño,
envolvente, distante y para siempre
- ¡amor eterno...!