Hugo Emilio Ocanto

En invernal tarde... -Relato-

Aconteció el año pasado.

Un recital de tango y poesía.

Un día diferente en mi vida.

Diferente porque nuevamente,

después de un paréntesis

frente al público,

volví a estar.

Con esa sensación

de placer, alegría y emoción

que se siente

estando frente a espectadores.

Gran tarde de música nuestra,

y cantantes excelentes

de tangos de antaño,

sobre todo.

Con inclusión de poesía.

Fui elegido para interpretar

poemas de mi autoría.

Un día distinto.

Un nuevo día

de sensaciones

de felicidad que emanaba

de mi sangre,

de mi alma,

de mi sentir.

Cuando se está

frente a espectadores,

bien llamado público,

algo distinto se siente.

Volcar todos mis sentimientos

en aquella tarde invernal,

con un atril

y una carpeta

con mis poemas,

los cuales leyéndolos

los interpreté

con todo mi sentir,

que fluyó desde

lo más profundo de mi alma.

Una tarde distinta.

De mucha emoción

e inolvidable felicidad.

Una invitación muy especial.

Una aceptación

de mi parte.

Una nueva oportunidad

de estar frente al público.

Mi gran felicidad

de escuchar aplausos.

Es el regalo

más preciado

para un intérprete.

Fotos y más fotos.

Y yo, feliz...

Un día de excepción.

Una tarde de emoción.

 

Hugo Emilio Ocanto

03/02/2016