Jose Luis Posa Lozano

TINTEROS VACÍOS

 

Aquí me siento, vacío y aturdido

con la cabeza umbría de silencios

y el corazón autista de latidos.

Me siento al filo de una cuartilla virgen

que espera ser poseída y fecundada

y se ofrece desnuda a mi deseo.

La miro con recelo y con vergüenza

como un macho viejo a su exigente hembra

y la acaricio, la tomo entre mis manos

pero no la poseo, mi pluma la desgarra

pero la tinta está ya desecada

y sólo queda tarquín en el tintero.

La veo tornarse lívida, amarilla

quizás de rabia, de pena o de despecho

y al fin se arruga de vieja entre mi puño

y desciende al limbo de los papeles huecos

entre reproches y húmedos recuerdos.

Así mi alma se siente ante tu ausencia

porque aunque estás, estás en otra esfera

y la pluma dorada de tus labios

ya no tiñe de oro mis cuartillas

ni mi piel desnuda enciende tu mirada.

Y así te sientes, culpable e impotente,

tampoco tú puedes darme lo que espero,

ya presiento tu mano arrebujarme

y lanzarme al abismo del olvido

entre colillas y legajos viejos,

mientras llenas de nuevo tu tintero.