No puedo defenderme del calor de tus besos
ni de tu tristeza, ni de tu ingenuidad
Te siento en mi grabado, candente, apasionado,
una llaga ardiente, llama de amor, que duele
Te encuentro en mis libros, en mis pinceles,
la melodía que escucho, en mi viejo sillón
Te montas en mis versos, te sumas a mis letras
y siento que más nada, puedo decir, solo sé de ti
Esta noche en cambio, soñar algo distinto o acaso
el ensueño te traiga hacia mi
Tal vez, si me opusiera al recuerdo que impregnaste
Desempolvaría la imagen, que me lleva amarte
o te seguiré amando a pesar de mí.
Tal vez inicie el viaje, sin principio ni fin
Tal vez te dé la espalda, con dolor, logre el olvido
Tal vez, así te olvide o te quiera mucho más.
Esta noche, en cambio, soñaré que me despido,
apagaré la lumbre, que ilumina la esperanza
descolgaré el traje del deseo, evocaré tu ausencia
y te dejaré partir...
Nélida Moni