Ania Marcheselli

Juguetes del destino.

Juegan la poeta.

Roban los colores del alma

De los cuerpos sin meta,

Errantes privados de calma.

 

Pinceladas en letras

Que en su tiempo fueron instantes,

Momentos repetidos para ser inmortales,

Juegan al poeta en sus pedestales.

 

Pobres los enamorados soñadores,

Juguetes de un destino contrariado

De sucesos desgraciados, cruelmente manipulados

Para fortalecer el amor de los afortunados.

 

Como duele ser la extra de tu vida,

Atrapada en un guión, abatida.

 

Momentos repetidos juegan al poeta

Haciendo que te ame, forzando a que te mienta.