Zeus, dios del olimpo
visó desde lo alto,
un pueblo y conoce
a Pandora, una joven
bella, pero muy curiosa,
la visita, y como presente
le obsequia, una caja
muy decorada, con piedras
de colores, brillantes y
preciosas.
Zeus le dice:
... condición te
pongo...dulce doncella,
¡No abras la caja!
-Si lo haces
a tu tierra, le traerás
muchos e infinitos infortunios-
La curiosidad de Pandora
era demasiado grande
Y sin miramientos, la abre
Un humo negro, cubre la región
Y todos los males, afloran
sin contención
Hambre, enfermedades, terremotos
y en el hombre, creció la vanidad
la envidia, la maldad, y la hipocresía
esta última, tiene escondida, la falta
de autenticidad, la que la poseen ,no son personas de fiar
y se esconden detrás de una mentira, algo
que está lejos de lo moral...
Triste Pandora, sabe que en el fondo
de la caja, queda algo más...
cuando apurada la quiso cerrar.
Con cierto temor, la abre y encuentra
a la esperanza, su rostro se iluminó.
Si bien, algunas cosas quedaron diseminadas
por el mundo, queremos creer, que gracias a la
esperanza, todo tipo de maldad, se podrá
reconocer y
controlar... la vanidad, la envidia y la misma
hipocresía.
Una adaptación de la \"Leyenda de Pandora\" para
tema semanal, por Nélida Moni.