Pacorro

20 de noviembre de 2015, suma y sigue.

Cumplí cuarenta años cantándole al vendaval,

a la carne membrillo,

a las camisas sin ojal.

Al mango de un cuchillo,

y a los mangos del frutal.

Hoy cumplo años cantando a lo que existe

en nuestra humanidad.

 

Así, canto a mi Atleti, a las persianas, al azafrán.

Al mus, a las moquetas

y a las noches de San Juan.

A las letras de poetas

y a las letras del diván.

Cuarenta años cantando a lo que existe

en nuestra humanidad.

 

Y a los cuarenta sumaré,

en honor a la verdad,

otros años que me quedaré

sin cantarle a la libertad.

 

Sin cantar a la libertad.