Los ecos del viento susurrante
que la paz y el silencio rompen
traen un soplo de desdicha
que trasciende más
allá de la frontera´
anunciando que la muerte acecha…
Yo me encojo de hombros
mi piel se eriza
esperando la fatal noticia…
Siento resquebrajar mi alma
en la más cruenta agonía,
viendo como caen los fragmentos,
los pedazos del alma mía
que se deshacen en melancolías.
¡Quisiera estar contigo y no puedo!
Para mirarte con ojos compasivos,
para que sientas que no estás solo,
que tienes mi cariño verdadero,
que tienes también mi compañía.
¡Quisiera estar contigo y no puedo!
por encontrarme tan lejos.
¡Quisisera estar contigo!
Para servirte de apoyo
y sientas que te amo
en esta hora de angustia
que te lacera el alma.
Felina