Abecés la soledad te pesa una tonelada
Te sumerges en la depresión,
Acaricias tus sentimientos para que no se pierdan en el aire etéreo
Y de pronto tus venas se desprenden de tu cuerpo.
Aunque en el verso más inesperado llega el AMOR
Lo das todo
Y te olvidan como el olvido recuerda al olvido
Frágil intentas rescatar algo de lo que regalaste
Pero tus penas no dejan que tus piernas reaccionen a tu cerebro
Llevo en mis manos las miradas que cruzamos
Los versos cortos que intercambiamos
Y el susurro de tu voz al hablar con mi corazón.