Marah

Ondina de las aguas:

Ondina de las aguas, las rocas y las flores:

tu voz concede paz, mitiga el son de un lunes,

tu ritmo en las alturas limita a los tenores

                 y das a mis quejidos diagnóstico de inmunes.

 

               Ondina, ¡oh! mi reina, son muchos tus rigores:

            hiciste mis cabellos de lirios…de zunzunes…

         Exhibo en mi relieve tu traje de colores

                 y puedo por un rato mirar mis pies impunes.

 

             Percibo en mis espaldas un suave parapeto,

             siguiéndote el zunzún se adhiere a mi persona

        y dice en mis oídos el más noble secreto:

               

     ¡Que seas tú la ninfa …yo sea la amazona!

¡Perdono su piedad, lo besa mi soneto…!

¡Mas ay, tu fuente ni olvida, ni perdona!

 

¡Es tuya la corona

por ese don divino de dar al tallo muerto

rocío, lumbre, podas…de perlas un injerto!

 

 

               

Las ondinas:  son ninfas acuáticas, mitad mujer, mitad pez.