En este que es el lenguaje
de las rimas y las prosas
dejen que diga las cosas
que tengo como bagajes.
No me hacen falta carruajes
sólo tengo algunos sueños.
Soy uno de los isleños
que allá en medio del río
a la ilusión de su crio
va arrimando algunos leños.
Vivo como otros tantos
que no pierden la esperanza
más sé qué veces no alcanza
rezarle a Dios y los Santos.
Hasta el sol cubren los mantos
de nubes en la tormenta.
La vida se vuelve lenta
si le faltan fantasías
y uno se pasa los días
mirando el sol que se asienta.