“POEMA A LA LETRA EÑE” - Como un homenaje post mortem a Gloria Fuertes
- Gloria Fuertes
con colaboración y arreglos de
Hermes Varillas Labrador
Todo tiene eñe en España,
¡Hasta en la Coruña y en España!
I
Eñe, el coño que nos trae,
o cigüeña con que te engañan,
eñe en letal y parca rebatiña
eñe en la llevadera guadaña,
eñe de una dañina ponzoña
cuando nos siembran cizaña,
eñe de puño o redil en rebaño
que lo disemina una alimaña,
eñe la niña que nos enfría
por nueve meses de hazaña.
II
Eñe la leña que nos calienta,
eñe la doña que nos apaña,
eñe de nostálgica morriña
de mi viña un poco extraña,
eñe la caña con que pescamos
de pronto una feroz piraña
o carroña con que nos pescan
politicastros en plena campaña,
eñe del paño que nos alienta
cuando el agua fría nos baña.
III
Eñe de moño que aún baila jota
allende tierras de la Bretaña,
eñe de una malagueña salerosa
o de una diminuta musaraña,
eñe de carantoña en que caemos
cuando no pegamos una pestaña,
eñe de uñas que nos aruñan
a veces con amor y otras con saña,
eñe de ruiseñor y de campiña
eñe extremeña con mucha maña
eñe de caño de una fuente
cercano a la venta de lasaña.
IV
Eñe de coñac o suave licor,
eñe de vino por la champaña
eñe de ron o whisky añejo
tan añejo que me regaña,
eñe de cuña que injerta
y es madera que acompaña,
eñe en la cama de añicos
cuando tenemos migrañas,
eñe de greñas y de mal sueño
cuando aún cuelgan lagañas.
V
Eñe de telaraña que teje
una habilidosa y gran araña,
eñe de un santo y seña
para escalar una montaña,
eñe, la virgulilla de antaño,
de la época de María Castaña
cual signo de menor tamaño
como suplantadora artimaña,
eñe de piña en tizana nutritiva
que nuestra salud no nos daña.
VI
Eñe en divertida muñeca,
eñe de una cálida cabaña
o eñe de niño, que somos todos,
los que latimos sin patraña
como muy pequeños retoños
con un poema de esta calaña
ilando setenta y ocho peldaños
y con rimas un poco hurañas
sin un tacaño desempeño
pero nacido de las entrañas,
eñe te defendemos con cariño
pese a amenazas que te empañan
.
VII
Eñe en piñata muy festiva
sujetada en sólida cucaña
y docenas de dulces añadidos
con papelillo que enmaraña,
y ya me despido en mi otoño
liando letras que se amañan
al poema original de su dueña
Gloria Fuertes de la España
madrileña para más señas,
de los niños su obra aledaña,
vayan las gracias cual buñuelos
hasta el cielo como verdes brañas.